EL CAJÓN NO TIENE QUIÉN LE ABRA

EL CAJÓN NO TIENE QUIÉN LE ABRA

Trozo de invierno helado y solo
estando el Universo ahí afuera
esperando,
el día contigo se viene arrastrando.
Este cuarto mío es tan diminuto
para las cosas que dilucido y que pienso...
Ahí mismo,en ese cajón pequeño
junto a libros y papeles abandonado
duerme un sueño viejo,
en silencio callado;
que no hay voces que vengan a despertarlo.
Ese sueño que vive en el cajón más olvidado
sin amo ni propietario,sólo entre versos respira
y late anónimo despacio.
Y de tarde en tarde el cajón se llena de palabras
textura de amor y vida encerradas,
que de estos mimbres estamos hechos
aun cuando este cajón no tiene dueño
no tiene  quién lo abra,
ni nadie que pose sus manos para acariciarlo
solo polvo y no esperanza.
KETTY IBÁÑEZ