POESÍA IV

     Mustios los días decidme-cuando el violín de mi vida ha interpretado una música,donde las estrofas sólo han cambiado de postura,pero la letra sigue siendo la misma-y quisiera haberse hecho de Poesía.
  Porque los versos de ahora están amueblados con horas y recuerdos de antaño y tras tus pestañas una mirada infinita que retengo y que guardo,de aventuras de Robinson,Héroes y Náufragos.
  Te bastó hacerte a tí mismo de alma de barro y corazón de poeta infinito,vestido de laurel y oro y agua,engalanando tu vida.
 Mis manos ahora se afanan buscando esperanza,temblando las alas que infinitos vuelos no alcanzan,serpentean vacíos en vértigos sobrecogidos;lamiendo llanuras en silencio que con estos brazos no se abarcan.Mientras hablo con la vida y le digo que para hacer Poesía pusiera en los corazones vacíos alegría y caricias y amor infinito y probablemente el mundo sería otro,más habitable y más bonito,y el miedo y el silencio huirían para siempre,mientras forjadores de sueños,locos y poetas cincelaran un orbe mayúsculo para todos bien hecho.Si la Poesía lo es todo...Realidad que antes fué Sueño.

    Ketty Ibáñez